Mi historia con el surf no comenzó en un mar en calma.
Crecí en una situación familiar complicada: mi madre, una guerrera soltera de tres hijos, y un padre biológico ausente, atrapado en el alcoholismo.
Yo, el mayor, llevaba sobre mis hombros una carga que me superaba. Pero encontré mi refugio: el mar.
El surf se convirtió en mi escape, mi manera de liberar tensiones y dejar los problemas en la orilla.
Lo curioso es que, al principio, era el peor en el agua. Sí, el peor de mi grupo de amigos.
Pero de esa frustración nació una obsesión por mejorar, por ser más que el chico con las probabilidades en contra.
Con pocos recursos y casi ninguna guía, busqué y aprendí como pude.
Ese camino lleno de retos encendió la chispa que hoy impulsa este proyecto.
Nuestra misión es clara: que nadie, sin importar dónde esté o quién sea, se quede atrapado en su nivel de surf.
Queremos que todos los surfistas experimenten la magia de una buena sesión, esa energía que trasciende las olas y nos llena la vida.
Porque el surf es más que un deporte; es salud, es libertad, es transformación.
Estamos aquí para ayudarte a romper cualquier barrera y llevar esa fuerza del mar a cada rincón de tu vida.
🌊🔥 Que nada te detenga. Que tu surf sea tu salvación, como lo fue para mí.